Muchas tecnologías antiguas están regresando a medida que los estadounidenses buscan depender menos de sus teléfonos, incluidas las líneas fijas que permiten a los niños tener acceso a un teléfono sin recibir un dispositivo inteligente.
“La gente se está dando cuenta ahora de que [dar sin pensar smartphones a los niños] es un desastre”, dijo una mamá de Rhode Island a Good Housekeeping. “Es una catástrofe. Es exactamente lo contrario a lo que se debe hacer.”
Los padres de todo el país están empezando a sentir lo mismo, especialmente después de que el Cirujano General de EE. UU. solicitó que se colocara una advertencia del Cirujano General en las redes sociales por el innegable potencial de daño que tienen para los usuarios jóvenes. En respuesta, muchos distritos escolares y estados han comenzado a explorar cómo limitar el acceso de los niños a los teléfonos durante el día escolar, mientras que los padres han comenzado a retrasar el momento en que sus hijos obtienen dispositivos.
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Para muchas familias, los teléfonos tontos y los relojes inteligentes han sido la respuesta para mantenerse conectados durante todo el día sin abrir la puerta a las redes sociales. Las líneas fijas se han convertido ahora en parte de este movimiento, con la empresa Tin Can liderando en gran medida el camino.
“Empezamos construyendo un teléfono solo para nuestros propios hijos, y ha sido increíble ver cómo eso se convierte en algo mucho más grande que claramente resuena con familias en todas partes”, dijo el cofundador y CEO de Tin Can, Chet Kittleson, a Geek Wire.
“Los padres de todo el mundo están lidiando con cómo dar independencia a sus hijos sin entregarles internet demasiado pronto”, añadió, explicando por qué su empresa ha tenido tanto éxito. “Ese cambio cultural – lejos de las pantallas y hacia formas de conexión más analógicas – ha sido un gran impulso para nosotros.”
Las líneas fijas ayudan a mantener a los niños conectados entre sí sin abrir la puerta a las redes sociales o al libre acceso a internet. Al mismo tiempo, también da tranquilidad a los padres al dejar a sus hijos solos en casa, mientras que también pueden comunicarse con ellos si es necesario, y viceversa.
Parece probable que la tecnología retro sea cada vez más utilizada por los padres en el futuro como una especie de ruedas de entrenamiento para preparar a los niños para una tecnología más potente sin abrir la puerta a muchos de los aspectos negativos asociados con estos dispositivos. Cada vez más estudios están saliendo a la luz que muestran los daños que conlleva exponer a los niños a los smartphones y, especialmente, a las redes sociales, ayudando a los padres a comprender lo que está en juego cuando les dan a sus hijos un dispositivo demasiado pronto.
Es alentador ver cómo los padres están siendo creativos para resolver el problema de la conectividad mientras protegen a sus hijos de los peligros de las redes sociales y el acceso sin restricciones a internet.
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