El QB suplente de Ole Miss declara ‘God’s Got Me’ después de una increíble victoria

Ole Miss derrotó a los Arkansas Razorbacks el sábado en una asombrosa victoria por 41-35, liderado por el mariscal de campo suplente Trinidad Chambliss.

La temporada pasada, Chambliss jugó para Division II Ferris State. El sábado, llevó a los Rebels a su tercera victoria de la temporada.

Según 247Sports, “Chambliss lanzó para 353 yardas en 21 de 29 pases y un TOUCHDOWN. También corrió para 64 yardas, con 23 de ellas en jugadas de mariscal de campo. Contabilizó tres TOUCHDOWNS en total.”

En una entrevista posterior al partido, la prensa le preguntó al atleta si estaba nervioso al entrar al juego.

“Sí, estaba un poco nervioso. Te mentiría si te dijera que no lo estaba. Pero, sabes, Dios me tiene. Mi Señor y Salvador JESÚS CRISTO, sabes, estuvo conmigo todo el tiempo,” declaró Chambliss.

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Sin embargo, los nervios comenzaron a calmarse para el joven mariscal de campo después de su primera carrera.

“Usualmente, cuando me golpean por primera vez y siento algo de contacto, entonces es como, okay, sabes, estoy jugando al fútbol,” explicó. “Es solo, sabes, un juego. He estado jugando a esto desde que era un niño pequeño. Así que, sí, ahí es cuando me calmé, y estuvo bien.”

La primera victoria de Chambliss con Ole Miss fue un “sueño hecho realidad”.

“Sabes, sueñas con momentos como este. Viniendo de un D2. Estoy muy agradecido y aprecio, sabes, la oportunidad que surgió hoy. Solo voy a asimilarlo todo, interactuar con todos los fans porque, sabes, ese era yo cuando era pequeño,” dijo.

Chambliss habló con ESPN, explicando cómo se sentía al prepararse para el fin de semana.

“Sabía esta semana, después de que Austin se lesionara, que iba a haber más en mi plato,” dijo Chambliss a ESPN. “Te preparas para jugar cada semana y nuestros entrenadores tenían un gran plan y realmente ejecutamos como equipo. Estoy muy orgulloso de nuestros muchachos.”

El entrenador en jefe Lane Kiffin dijo a los medios después del partido: “Gran trabajo de Trinidad, obviamente, y un gran trabajo de nuestros entrenadores al preparar a nuestro mariscal de campo suplente. Trinidad realmente cuidó el balón, salió de apuros toda la noche y solo fue derribado una vez.”

“Hemos tenido muchos partidos salvajes con estos chicos,” añadió, hablando de los Razorbacks. “Tuvieron un gran plan de juego y hay que darles crédito. Es una buena victoria para nosotros.”

Aunque Chambliss ciertamente sintió algunos nervios, los entregó a Dios y jugó fenomenalmente.

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