Erika Kirk se sentó recientemente para una entrevista emotiva donde describió el momento en que vio a su esposo Charlie Kirk por primera vez después de que fuera fatalmente disparado durante un evento en septiembre.
Kirk había estado hablando en la parada del “American Comeback Tour” de Turning Point USA en la Universidad del Valle de Utah el 10 de septiembre cuando una bala de asesino terminó con su vida.
Erika recordó entrar en la habitación del hospital y ver a Charlie tendido allí “con esa sonrisa de suficiencia en su rostro”. Esa expresión, explicó, llevaba un mensaje: “Pensaste que podías detener lo que he construido. Pensaste que podías terminar esta visión, este movimiento, este avivamiento… Tienes mi cuerpo; no tienes mi alma.
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Erika dijo más tarde que, a través del dolor, todavía habla con su esposo y mantiene una estrecha relación con Dios.
“Hablo con él todo el tiempo, le digo: ‘Cariño, solo dame tu sabiduría. Háblame’. La gente diría, si no puedes dormir, toma algo para dormir. El Señor me ha dejado dormir muy bien, pero no quiero tomar nada”, dijo.
Explicó cómo, por doloroso que sea este momento, quiere estar completamente alerta para escuchar lo que Dios tiene preparado para ella.
“Si tomo algo, me adormecerá y no podré escuchar al Señor. Y por Charlie. Quiero poder hablar con él. Quiero sentir esto tan profundamente, tan profundamente, para saber cómo el Señor quiere usarlo”, dijo, añadiendo “Me di cuenta de que eso es sanación. Nunca quieres dejar de hablar de las personas que amas, aunque estén en el cielo, especialmente a tus hijos porque eso significa que todavía están allí. Siempre quiero que la voz de mi esposo y su nombre estén en los labios de la gente”.
En otro momento de la entrevista, Erika hizo una declaración escalofriante que muchos han especulado que sería cierta.
“Realmente creo que si el Señor le diera la opción de regresar a la tierra, y si el Señor dijera ‘Esto es para lo que tu muerte va a ser el catalizador, ¿quieres volver e intercambiarlo?’” Con lágrimas en los ojos, dijo, “Él diría no”.
Erika es ahora la CEO de Turning Point USA, según los deseos de Charlie. Su legado es un recordatorio de que Dios realmente puede tomar lo que es malo y convertirlo en bien.
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